Valla viva de hoja perenne
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Periodista, editora y columnista independiente con experiencia en revistas y sitios web nacionales, Fiona se ha especializado en jardines. Disfruta encontrando y escribiendo sobre todo tipo de jardines, desde los más pequeños de la ciudad hasta los impresionantemente diseñados en grandes casas de campo. Es una firme creyente de que la jardinería es para todo el mundo, y que no importa si se tiene un solo alféizar o una hectárea, siempre se puede encontrar paz y alegría en el exterior. El pequeño jardín de su casa eduardiana está actualmente en proceso de renovación, pero su objetivo es llenarlo siempre de flores, plantas trepadoras, color y fragancia, y de todos los tesoros que pueda encontrar.
La valla viva de más rápido crecimiento
Las vallas en su granja o finca definen los límites de la propiedad y separan las zonas de producción (jardín, pastos, huerto). Proporcionan privacidad y seguridad frente a intrusos animales (y quizás humanos). Encierran al ganado y lo protegen de los depredadores. Protegen las zonas de cultivo de los asaltantes salvajes (como los ciervos) y de los animales aliados (como las ovejas y las cabras).
La primera opción para esta necesidad multifuncional de la granja puede ser un vallado fabricado: alambre tejido o eléctrico, paneles soldados para el ganado, tablas sobre postes tratados a presión, o incluso plástico virgen o reciclado. Sin embargo, a medida que se agudiza la crisis energética y medioambiental, estas opciones son cada vez menos atractivas y más caras. Los conservantes químicos, las pinturas y los agentes galvanizantes utilizados en la fabricación y el mantenimiento de las vallas pueden tener efectos tóxicos en el medio ambiente. Además, la mayoría de los cercados fabricados son una solución “uno por uno”. Por ejemplo, una valla de alambre para contener el ganado presta ese servicio y nada más. La clave para una granja más autosuficiente que imite los sistemas naturales es encontrar soluciones que resuelvan simultáneamente más de un problema, proporcionen más de un servicio y apoyen más de un proyecto. Así pues, las cercas vivas.
Las mejores plantas para la línea de la valla
David Beaulieu es un experto en paisajismo y fotógrafo de plantas, con 20 años de experiencia. Estuvo en el negocio de los viveros durante más de una década, trabajando con una gran variedad de plantas. David ha sido entrevistado por numerosos periódicos y revistas nacionales de Estados Unidos, como Woman’s World y American Way.
La creación de privacidad en el patio es a menudo una característica esencial del espacio exterior urbano o suburbano, y las vallas de privacidad vivas son una gran opción tanto para los propietarios como para los inquilinos para crear un oasis en el patio trasero que no sea interrumpido por los vecinos o por vistas antiestéticas. Las vallas de privacidad pueden incluso desempeñar un papel en las zonas rurales para añadir una exuberante vegetación a sus ideas de paisajismo.
Algunas vallas de privacidad vivas se componen de árboles, arbustos o plantas como el bambú, mientras que otras utilizan vallas resistentes debajo de las plantas para mantener a las mascotas y a los niños dentro del límite del patio. En la mayoría de los patios se pueden hacer fácilmente estructuras sueltas utilizando plantas para crear vallas de privacidad con paredes vivas.
Una valla de privacidad viva no siempre se construye con una valla real, sino que estas vallas sirven como bordes de plantas exuberantes y vivas. Se pueden utilizar diversas opciones para crear este tipo de valla en su espacio: La disposición de plantas altas, la adición de plantas de arrastre a la celosía e incluso la cobertura de una valla existente con vegetación trepadora son ideas de paisajismo muy populares para las vallas de privacidad vivas. Lo más habitual es que los jardineros y paisajistas opten por opciones de paisajismo blando, es decir, que la valla viva esté compuesta exclusivamente por plantas en lugar de incluir materiales de vallado.
Paneles de vallas vivas
El poeta Robert Frost lo dijo mejor: “Las buenas vallas hacen buenos vecinos”. Pero atrincherarnos detrás de muros de 2,5 metros no es muy práctico y, en algunos casos, es posible que la asociación de propietarios (HOA) ni siquiera lo permita, pero crear un oasis privado con plantas puede ser la solución.
Deberá empezar por planificar lo que quiere de una frontera de privacidad. Y el primer aspecto a tener en cuenta es el nivel de privacidad que necesita. ¿Desea una cobertura completa o le parece bien que se pueda ver a través de ella? Eso determinará el tipo de plantas que utilices y su espaciado. Algunas plantas sólo crecen un metro de altura, mientras que otras pueden llegar mucho más alto.
También querrá evaluar qué parte del jardín quiere bloquear. ¿Quiere un borde de privacidad que se extienda por todo el perímetro del jardín? ¿O sólo es aceptable una dirección en la que actualmente tiene menos privacidad? Por ejemplo, una plantación de privacidad viva en todo el patio podría lograrse mejor con arbustos gruesos, mientras que la privacidad parcial podría requerir sólo un árbol más grande.